Además de enfocarse en medidas preventivas, es requerido por las regulaciones instalar equipos o dispositivos de contención para controlar fugas, grietas o fisuras. Algunas pautas a seguir incluyen:
Contención secundaria: Los sistemas de contención deben tener capacidad suficiente para retener al menos el 10% del volumen total de los contenedores primarios o el 100% del volumen del contenedor más grande, el que sea mayor.
Tarimas y cubiertas para derrames: Estas deben ser lo suficientemente grandes para contener de 1 a 4 tambores de 30 a 55 galones o más de un tanque IBC. Por lo general, tienen puertas enrollables en la parte delantera (o en ambos extremos) y puertas abatibles en la parte inferior, junto con rampas para facilitar la carga y descarga.
Bermas de contención de derrames: Estas son la solución ideal para derrames más grandes causados por contenedores, embarcaciones o vehículos. Están hechas de materiales resistentes pero flexibles como el copolímero o PVC y se colocan debajo de camiones cisterna, vagones de ferrocarril, bocas de pozo y grandes cantidades de tambores e IBC.